Creo un espacio sin muchas pretensiones más que el de compartir y opinar acerca de lo que veo desde esta pequeña tierra del tereré, situado en el corazón de América del Sur. ¡Pulgares arriba!

domingo, 27 de enero de 2013

Ojalá Zulema y Demetrio nos puedan disculpar

Coincidirán conmigo que la imagen vista más abajo parece extraída de una película de ciencia-ficción, pero no. Aunque parezca mentira, es una foto actual del Lago de Ypacaraí, lindante entre los Departamentos de Cordillera y Central.
Fotografía de ABC Color.
Fotografía de ABC Color.
No puedo entender cómo se pudo llegar a semejante descuido. Y es que la inconsciencia sumada al egoísmo del hombre pueden ir hasta límites insospechados, causando un daño que el tiempo y los estudios pertinentes podrán calificar de permanente o temporal, pero por sobre todo deja al desnudo cuánto amor propio se ha dejado de sentir, y cuánta educación nos hace falta.
Se pueden buscar muchos culpables y obligarlos a reparar el perjuicio que han ocasionado, pero la solución (probablemente épica, probablemente no) es que las mismas personas no deberíamos permitir que se realicen acciones de ésta naturaleza. Con un sistema judicial ineficiente y una clase política que deja mucho que desear, pienso que mediante la responsabilidad individual se puede construir una responsabilidad colectiva, de tal manera que no haga falta que éstos organismos intervengan.
Lo que alguna vez sirvió de inspiración a Zulema de Mirkin, que más tarde junto a la melodía de Demetrio Ortíz dio vida a una de las más bellas guaranias, hoy día es ocasión de tristeza y lamento.
Me gustaría poder conocer de ésa noche tibia junto al Lago Azul, de la cual se hablaba y se cantaba. Que también lo puedan conocer mis hijos, mis nietos. Zulema, Demetrio, espero que nos puedan disculpar.