Creo un espacio sin muchas pretensiones más que el de compartir y opinar acerca de lo que veo desde esta pequeña tierra del tereré, situado en el corazón de América del Sur. ¡Pulgares arriba!

lunes, 18 de noviembre de 2013

"Si así no lo hiciere, que Dios y la Patria me lo demanden."

En éstos últimos días, se estuvo y sigue viviendo un ambiente distinto en esta pequeña tierra del tereré. Debido a una ola de "transparencia" iniciada por la aprobación de un Proyecto de Ley presentado en octubre, y la presión ejercida por la ciudadanía a través de los medios y las redes sociales, los entes e instituciones del Estado se vieron obligados a publicar la nómina de funcionarios nombrados y contratados, así como también los salarios que estaban percibiendo los mismos. Es así como se desnudaron casos vergonzosos de nepotismo, tráfico de influencia y hechos de corrupción que salpicaban a los actores políticos de turno, generando una indignación colectiva y la actuación inmediata por parte de los organismos de la Justicia.
Se destacan principalmente dos casos. El primer caso es el de Perla Leticia Paredes Acosta, hija de la diputada Perla de Vázquez, quien figuraba como funcionaria de cuatro entes del Estado (Ministerio de Salud, IPS, Poder Judicial, Cámara de Diputados) y también de Itaipú. La misma cobraba una suma aproximada de Gs. 341.000.000 en concepto de salarios anualmente, lo que representa unos U$S. 76.286 hoy día. En tanto, la Constitución Nacional establece en el Art. 105 lo siguiente: "De la prohibición de doble remuneración: Ninguna persona podrá percibir como funcionario o empleado público, más de un sueldo o remuneración simultáneamente, con excepción de los que provengan del ejercicio de la docencia." En tanto que su madre, está expuesta a una sanción penada por el Art. 201 de la Constitución Nacional, que menciona como causa de pérdida de investidura el uso indebido de influencias, fehacientemente comprobado.
Perla Leticia Paredes Acosta, hija de la
diputada Perla de Vázquez.
La misma posee el título de grado de Doctora en Medicina y Cirugía, pero según publicaciones hechas en los medios, se habría recibido en una Universidad privada local, y no habría culminado los supuestos estudios realizados en Cuba, ya que un requisito de la beca otorgada por el país es mantener una determinada calificación mínima, lo que al parecer no habría alcanzado. La gota que colmó el vaso fue que luego de ser despedida de Itaipú, habría cobrado la suma de Gs. 67.000.000 en concepto de indemnización por parte de la Binacional. La misma se presentó a declarar ante la Fiscalía Anticorrupción, ya que fue imputada por los hechos punibles de Cobro Indebido de Honorarios, Producción Indebida de certificados sobre Méritos y Servicios de contenido falso, y Uso de certificados sobre Méritos y Servicios de contenido falso.

El segundo caso, es el de Gabriela Quintana, más conocida como la "Niñera de Oro". La misma fue nombrada funcionaria permanente de la Cámara de Diputados por Resolución N° 681 del 17 de febrero de 2010, función que desempeñaba hasta la fecha según la planilla de asistencia de la Dirección de Recursos Humanos de la institución. Posteriormente, el pasado 4 de marzo de 2013 obtuvo su contratación en Itaipú como asistente administrativa Categoría II, con un salario mensual de Gs. 8.739.300 hasta el 11 de octubre de 2013, día que rescindieron su contrato, generando un perjuicio patrimonial al ente por valor de Gs. 71.683.460, lo cual incurrió en su imputación por el hecho punible de Cobro Indebido de Honorarios. Habría accedido al cargo bajo el "padrinazgo" del actual senador Víctor Bogado (ANR), quién también fue imputado por los hechos punibles de Cobro Indebido de Honorarios, en calidad de cómplice, y por Estafa, en calidad de autor. La Fiscalía realizó el pedido de desafuero para el mismo, pero en la sesión de la Cámara de Senadores tal pedido fue rechazado, por mayoría de votos (23 contra 22), por lo que hoy el mismo se escuda bajo el amparo legal brindado por sus colegas, y queda prácticamente "blindado" ante la posibilidad de una investigación.
Gabriela Quintana Venialgo (izq.), niñera de las hijas
del senador Víctor Bogado. La misma cobraba Gs.
17.000.000 mensualmente de la Cámara de Diputados

e Itaipú Binacional.
Luego de analizar estos dos casos, de los miles que probablemente han de haber y los cuales desconocemos, queda abierto el debate. Esto no solamente demuestra la falta de competitividad de los organismos de regulación y control de los Recursos Humanos del Estado, sino que abre la posibilidad de pensar que el Paraguay no es un país pobre por falta de recursos, como figura en la mayoría de las estadísticas y estudios económicos, sino que es un país sumido en la corrupción y en la desidia de una deplorable administración y gestión por parte de las autoridades correspondientes, lo cual desencadena en la gran desigualdad social reinante. El viernes pasado, la ciudadanía convocó a una manifestación a través de las redes sociales denominada "#15NPy", en repudio y rechazo a la decisión de la Cámara de Senadores de votar en contra del desafuero del senador Víctor Bogado, así como también por los numerosos casos de nepotismo y corrupción que se habían hecho de público conocimiento, lo que hasta hoy sigue generando un "efecto dominó", ya que sorpresivamente algunos locales comerciales decidieron declarar "Personas no gratas" y reservarse el derecho de admisión a los 23 senadores que votaron a favor de que el mencionado senador, pueda eludir a la Justicia.
Existen opiniones que están en contra del proceder de los locales comerciales, calificando como "marketing popular" y hasta "oportunismo" la decisión de adherirse al sentimiento y postura de la ciudadanía. Puede ser que lo sea, pero lo que creo que queda claro (y que en el fondo es lo importante y destacable de todo esto), es el hecho de que existe una clara intención general y mayoritaria de expresar que los mismos no son bien vistos en nuestra sociedad y que realmente se espera el cumplimiento de la Justicia en este caso. Ahora bien, hay que recordar los nombres de los más conocidos como "Los 23" y no olvidarnos tampoco de los restantes 22, claro, porque hoy aparecen como los "buenos de la película", pero la realidad es que mañana pueden ocupar tranquilamente la otra posición.

Los 23 impulsores y cómplices de la impunidad y corrupción en el caso del senador Víctor Bogado son: Blas Llano, Emilia Alfaro de Franco, Mirta Gusinky, Ramón Gómez Verlangieri, Julio César Velázquez, Oscar González Daher, Gustavo Alfonso, Zulma Gómez, Enrique Bacchetta, Enzo Cardozo, Silvio Ovelar, Jorge Oviedo Matto, Julio Antonio Quiñónez, Julio César Franco, Luis Alberto Wagner, Blanca Fonseca, Oscar Salomón, Juan Darío Monges, Víctor Bogado, Nelson Aguinagalde, Fernando Silva Facetti, Carlos Núñez y José Manuel Bóbeda. Creo conveniente volver a poner a conocimiento sus nombres, ya que es un hecho que en el próximo período volverán a candidatarse para ocupar un escaño dentro del Poder Legislativo, y dependerá de nosotros darle la posibilidad de ello.
Marcha organizada por la ciudadanía,
denominada "#15NPy".
Pienso que tenemos que continuar manifestándonos, cacareando, saliendo a las calles, movilizándonos, "armando lío", porque todavía no nos damos cuenta de que en realidad los legisladores son empleados y servidores nuestros, y por tanto deben obedecer y cumplir con las funciones que le fueron designadas. Parte de su Juramento reza: "Si así no lo hiciere, que Dios y la Patria me lo demanden."