El "Ferrari" de Kalé y las sentatas

Estas últimas dos semanas fueron bastante "reveladoras", en cierta manera, ya que se dio a conocer mediante investigaciones y publicaciones periodísticas realizadas por el diario Última Hora, cómo se está manejando el dinero público en el Rectorado de la Universidad Nacional de Asunción, al frente del Dr. Froilán Enrique Peralta Torres, ex decano de la Facultad de Veterinaria desde el año 1991 hasta el año pasado, quién asumió el cargo de Rector desde el mes de abril del 2014, después de las elecciones de nuevas autoridades de la casa de estudios más importante de nuestro país. Existen varios antecedentes a los que nos podemos remitir para darnos cuenta de que el problema no es nuevo. Corre el año 2009, y el Rectorado de la UNA, en ése entonces bajo el mandato del Ing. Agr. Pedro González, es objeto de un trabajo de auditoría por parte de la Contraloría General de la República. Si bien se puede acceder al extenso documento con total libertad desde el portal de la CGR, destaco una parte de la conclusión general a la que llegó el equipo auditor:

"Cabe señalar que la institución tiene como eje fundamental la Autonomía Universitaria, sin embargo, sus normativas internas no se ajustan en muchos aspectos al cumplimiento de las disposiciones emanadas de la Ley 1535/99 “De Administración Financiera del Estado”, por lo que deberá iniciar las gestiones necesarias para la conformación de una comisión revisora permanente, que analice, estudie y evalúe, además de los artículos referidos en el informe, para adecuar y actualizar en forma oportuna y permanente el Estatuto de la Universidad Nacional de Asunción y la interpretación de las normativas se ajuste a la Ley. Igualmente considerando la Autonomía Universitaria se destaca la importancia de que las normativas internas se ajusten a la Ley, pues permitirá que los recursos del Estado sean aplicados correctamente, y transparentar la gestión de la Institución y de las unidades académicas teniendo en cuenta que sus reglamentos internos se hallan expuestos a las interpretaciones sujetivas según las informaciones proveídas por la Entidad."

Para el año 2014, las elecciones de nuevas autoridades de la UNA venían teniendo un fuerte tinte político, con el polémico senador Juan Carlos "Kalé" Galaverna como figura central, quién señalaba abiertamente su apoyo y su preferencia hacia la candidatura del Dr. Froilán Peralta para el cargo de Rector de la UNA. Es más, lo comparó con un "Ferrari", y dijo que el otro candidato pujante por el cargo, el Dr. Antonio Rodríguez, era un "escarabajo descompuesto". (Al mismo tiempo, el senador negaba tener injerencia alguna en las elecciones de nuevas autoridades) Como crónica de una "victoria" anunciada, el Dr. Froilán Peralta fue electo nuevo Rector de la UNA. Ante esto, las declaraciones del senador Galaverna fueron que con la victoria del Dr. Peralta "ganó la Universidad Nacional de Asunción y ganó la nación paraguaya".

No tuvo que pasar mucho tiempo para que se comiencen a ver las primeras consecuencias de la asunción del Dr. Peralta como Rector. La UNA cayó 23 puestos en un ránking de universidades a nivel mundial, ocupando el puesto Nº 101 y con ello, afectando la imagen y la credibilidad que posee la universidad a nivel nacional e internacional. Lo que sorprende y es noticia esta vez, es la cantidad de rubros docentes que el Rectorado otorgó a personas que no cumplen con la función asignada para tal efecto, así como también del salario que mensualmente percibe el Rector, que superan los Gs. 50.000.000, ya que actualmente sigue cobrando (aparte de su salario como Rector) su salario como profesor de la Facultad de Veterinaria, siendo que ya no acude a impartir clases. Estos hechos derivaron en la decisión de la CGR de intervenir nuevamente el Rectorado de la UNA, así como también la Facultad de Veterinaria, e iniciar una auditoría en ambas instituciones. Las justificaciones dadas hasta el momento, se limitan a decir que las contrataciones y los montos destinados a salarios "se ajustan al Estatuto y a los Reglamentos de la universidad". Los diversos gremios estudiantiles están expresando sus posturas por medio de comunicados públicos, y organizando movilizaciones para expresar su rechazo y repudio ante estos supuestos hechos de corrupción. No es difícil entender las causas de los constantes "recortes presupuestarios" que sufre la universidad, si quienes son responsables de la administración y del uso de los recursos a fin de cuentas son los que alientan y amparan el mal uso de los mismos.

Por otro lado, los estudiantes secundarios comenzaron, desde el mes de agosto, a organizar "sentatas" en señal de protesta y reclamo para el mejoramiento de la educación en el Paraguay. Comenzó en el Colegio Cristo Rey y luego se fue extendiendo a otros colegios e instituciones con el apoyo de padres y profesores, y para el viernes 18 de setiembre se convoca a una gran Marcha Nacional. Se busca colocar a la educación como la política central del país aumentando la inversión en el sector, velando por derechos legítimos de los estudiantes como lo son la alimentación, el transporte, una adecuada infraestructura para el desarrollo de las clases, así como el mejoramiento en la capacitación de docentes. 

La educación debe dejar de ser un privilegio para unos pocos; debe dejar de estar salpicada por hechos de corrupción y actos que atentan contra ella; debe dejar de ser uno de los últimos puntos a tocar a la hora de elaborar el Presupuesto General de Gastos. La educación debe ser uno de los pilares más importantes dentro de lo que constituye nuestro desarrollo como país; debe ser puente que una nuestro presente con un futuro y un porvenir mejor; debe ser nuestra garantía para la construcción de una sociedad más justa, más equitativa y más inclusiva. El futuro se construye hoy, no mañana. Como escribió el periodista Andrés Colmán, hoy "los jóvenes se sientan para levantar al país". #YoMarchoEl18